Tributo a Agustín

Agustín ya no volverá a beber. Agustín murio de cirrosis cronica, y yo siempre le recordare. No llegaba a los 50 años, deja mujer y dos hijos, pero a mi también me deja un pequeño vacío porque casi todos los dias q voy a trabajar le recuerdo.

Agustín era compi de curro, era lo que podemos llamar el correveydile. Te hacia copias de la llaves del trastero, te compraba los latigillos de red, te presentaba los documentos en los registros oficiales. Era una persona con la q me identifico muchas veces, una persona que no se molesta si se tiene q cambiar un flexo o recoger unos cables sueltos del suelo.

No estaba mucho en la ofina pq estaba de un lado para otro, pero spre q venia, buscame un hueco para charlar con él. Es de las tipicas personas con las q te agrada conversar, nunca hay malos rollos y las risas pueden saltar en cualquier momento; risas que se agradecen más si estás en un entorno laboral. Nos contábamos nuestras intimidades, nuestras gamberradas de jóvenes y no tan jóvenes...

Agustín tiene un recuerdo imborrable en mí pq una vez no era capaz de abrir una puerta pq la llave q tenia era una copia y no encajaba perfectamente. Agustin, sin decir nada, se acerco a mi y me miro como diciendome "alma de cantaro...". Cogió la llave de mi mano y me enseño como meterla para que encajase bien y me abrio la puerta por mi.

Desde entonces, spre le recordaba cuando llegaba a trabajar y abria una puerta con una llave. Un día me dijeron q murió, pero para mí sigue ahí, mirandome con esa afable cara y de buena persona, ayudandome a abrir la puerta. Agustin era lo q llamamos un buen tipo y creo q murio feliz, es decir, esperando a la muerte con calma y de una manera consecuente.

Agustin, no te olvido.